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El sujeto formado se convierte en un/a  promotor/a que es representante de su comunidad y/u organización, con la responsabilidad de concientizar, organizar, capacitar  y buscar soluciones junto con sus comunidades y organización. 



De manera conjunta a la formación de promotore/as, buscamos construir una base social, una organización sólida que comparte los retos de su desarrollo, que comparte el esfuerzo y pueda cosechar el fruto de su trabajo conjunto. La organización y la formación son los horcones que sostienen con el esfuerzo y la solidaridad el trabajo de defensa de los Derechos Económicos, Sociales, Culturales y Ambientales (DESCA). En cada comunidad se forman y nombran  comités, mesas directivas y colectivos (cada cargo es rotativo), se elaboran los documentos básicos, se realiza capacitaciones y proyectos.


Pero este proceso de organización de la comunidad lleva su tiempo, ya que las comunidades rurales, suburbanas y urbanas con las que trabajamos, tienen una historia de marginación, divisiones políticas y religiosas que impide la realización de trabajos comunes organizados. A lo largo de este proceso, en base a nuestras capacidades humanas, materiales y económicas, hemos gestionado proyectos que permita a las comunidades a aprender a trabajar en común de forma organizada, para que mañana, cuando se logre mayores inversiones con el trabajo de gestión, ya se hayan superados los conflictos y la comunidad podrá hacerse responsable de proyectos que tendrán un impacto real en el mejoramiento de sus condiciones de vida.

ORGANIZACIÓN COMUNITARIA

El conocer a los niños y las niñas de los pobres y amar la política, son las mismas cosas. No se puede amar a los seres humanos que son marcados por leyes injustas, sin trabajar para formar otras leyes.

David Werner y Bill Bower

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